La revista URBS nació como un acto de rebeldía, pero han pasado diez años, y todo aquello perdió un poco de sentido. El sistema oficial de las revistas de impacto no sólo se consolidó, sino que se ha extendido y afianzado incuestionable en toda la comunidad académica internacional. Los críticos apenas aciertan a plantear que se revisen los estándares por los que se mide la calidad, pero nadie propone el órdago que nosotros entonces pretendimos. Nos hemos hecho mayores por el camino, y ya sólo nos mueve sobrevivir. Quisimos entonces ser la casa de los que no tenían casa en el sistema oficial de publicaciones, y ahora sólo queremos que la casa no se derrumbe, que no entre en desahucio, que siga habiendo casa, aunque tenga pocos inquilinos, y las paredes algo desconchadas. El cartel de la entrada sigue siendo de bienvenida, como saben todos los que han tratado personalmente con nosotros.
Mientras tanto, también nuestras ciudades se han hecho mayores, o quizá ahora las miramos con ojos algo más cansados. Entonces todavía éramos lectores de las utopías postmetropolitanas de Los Ángeles, admiradores de los arquitectos espectaculares, habitantes orgullosos del planeta miseria, nuestro hogar en clave ciberpunk. Ahora, la ciudad ha callado, y sólo se escucha el odio de las redes, la polarización de las ideologías, donde no queda motivo para el pensamiento, sino compromiso con la causa. Toda causa tiene a un otro como enemigo imperdonable, alguien a quien silenciar, a quien hacer desaparecer, y así la ciudad parece ahora un campo de batalla, camino de ninguna parte. La utopía postmoderna era otra cosa, era una promesa, un resurgir de las ruinas modernistas, para seguir caminando orgullosos más allá de las etiquetas, de los nombres, de las cadenas del significante. Todo eso ya no se escucha. Fuimos testigos de un sueño, pero el sueño ha concluido. Vienen tiempos difíciles, o quizá todo es retórica gastada, también la nuestra.
Hemos repetido durante años la consigna del pensamiento libre. Esa es nuestra bandera. Somos los que una vez nos quedamos sin casa, excluidos por decisión propia, fuera de los circuitos oficiales de lo correcto. Por eso seguimos caminando, no porque haya un lugar seguro que nos aguarde, sino para que haya camino. Mientras los jóvenes se preparan para conquistar el imperio, nosotros continuamos perdidos en el desierto, huyendo del ruido de las voces todas. Mark Twain hizo a un hombre caminar alrededor del planeta, para volver sorprendido hasta su propia casa. Un viejo poeta chino hizo a un anciano viajero volver a su pueblo natal, para que los niños le preguntaran de qué lugar procedía. Quizá la casa es sólo eso, lo que hubo al principio y lo que habrá al final, que al cabo son lo mismo, el enigma sencillo del fuego en el hogar. También aquí viven los dioses, dijo Heráclito, el oscuro.
Gracias a todos por haber caminado en algún momento con nosotros. Queden en paz, nosotros continuamos la marcha camino de alguna parte, cuyo nombre desconocemos. Quién sabe cuántos años, cuántos textos, cuántas ciudades nos esperan.
En este enlace pueden entrar a las páginas de acceso libre de URBS, Revista de Estudios Urbanos y Ciencias Sociales, el segundo número del año diez. Sean ustedes cordialmente bienvenidos a la lectura.
Pinche aquí: URBS 10(2)
Índice
La ciudad y el derecho de conquista / Baltasar F.R.
Arquitectura como imagen del mundo: obstáculos, posibilidades, perspectivas / Guillermo Aguirre Martínez
Apuntes para una discusión de la ruina / Gabriel Esteban Espinoza Rivera
Teatro Fiodor Dostoievski. El nuevo referente urbano de Nóvgorod / Jelena Prokopljevic
Nuevas conexiones de complejos industriales históricos con su entorno urbano. El caso de las Reales Atarazanas de Barcelona / Patricia Tamayo e Yves Schoonjans
Monumento Ser Fronterizo, una representación cultural y transfronteriza de Ciudad Juárez / Sergio Raúl Recio Saucedo
Arte callejero de una ciudad en cuarentena / Fabián A. Bloomfield
Reseña de Setha Low (2019) Spatializing culture: The ethnography of space and place / Gabriel Esteban Espinoza Rivera
Death and love by x1klima vía Flickr
La imagen de portada es Coal-power plant by x1klima vía Flickr
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